P. ¿Podrías explicarnos las líneas generales del programa que presentáis para el Ayuntamiento de Logroño?
R. El Partido Comunista de los Pueblos de España (PCPE) presenta su candidatura, como dice nuestro lema de campaña, para convertirse en la fuerza del pueblo trabajador, para que la mayoría obrera y popular encuentre una organización que defiende sus intereses y derechos por encima de todo.
En este contexto, nuestra organización prioriza una serie de cuestiones, para nosotros y nosotras fundamentales:
1º: Mecanismos de fomento de la participación directa de los trabajadores y las trabajadoras en la toma de decisiones que les afectan: Reglamento de Participación Ciudadana eficaz, referéndum vinculante, obligatoriedad de rendir cuentas periódicamente a la ciudadanía… todo ello en el marco de avanzar al establecimiento de mecanismos de contrapoder popular: consejos barriales y de distritos que realmente recojan las aspiraciones populares, fiscalización de la gestión municipal, participación y cogestión de los Presupuestos.
2º: Defensa a ultranza del sector público y municipalización de todos los servicios que ahora presta el Ayuntamiento de Logroño y que están en manos privadas. De igual forma que el punto anterior, participación de los trabajadores y las trabajadoras en la gestión de esas empresas municipales y en la gestión de dichos servicios.
P. ¿Cuál ha sido vuestra línea de trabajo en el ámbito municipal en los últimos cuatro años?
R. No es posible participar en la vida política en este momento sin situar como primer objetivo las consecuencias que la crisis capitalista está provocando entre la mayoría obrera y popular. Esto lo impregna todo, también en lo referente a la vida municipal.
Enlazando con la pregunta anterior, y por resumir algunas, hemos dado la batalla por la municipalización de diversos servicios municipales subcontratados, donde se están cometiendo verdaderos atropellos: empresas de ocio y tiempo libre, de limpieza de parques y jardines…Hemos denunciado el papel de determinadas empresas, con nombre y apellidos, como Alternativa 4 o Eulen.
De igual forma hemos tomado parte activa en distintos movimientos unitarios que han tenido, digamos, objetivos locales: lucha contra el Polígono de Experiencias para Fuerzas Especiales (PEFE), contra la llamada Ordenanza Cívica y sus atropellos contra determinados derechos civiles…
No obstante, y como decía la principio, todo viene marcado por la crisis capitalista, por lo que nuestro accionar cotidiano ha sido denunciar y tratar de movilizar todas las acciones posibles contra las medidas que los partidos del sistema están tomando: contrarreformas laborales, del sistema público de pensiones…
P. En tu opinión, ¿cuál es el problema más urgente que debe abordar la corporación que salga de las elecciones?
R. Contesto en función de las prioridades programáticas que mencioné antes.
1º: Darle la voz y la posibilidad de intervenir en la vida municipal y en todas aquellas decisiones que afectan su vida y condiciones de trabajo. Como siempre digo, que no se tomen medidas sin contar con la voluntad del pueblo, porque es el primer paso para que se tomen contra sus intereses.
2º: Terminar con esa inyección de dinero que sale del pueblo trabajador para que se lo embolsen empresas privadas que tienen subcontratados servicios municipales, y que mantienen unas condiciones de explotación aberrantes: ocio y tiempo libre, limpieza, zona azul…
Otras cuestiones no menores pueden ser resolver el desequilibrio de infraestructuras en los barrios: bibliotecas, centros jóvenes o de mayores…
Y, por supuesto, una política urbanística donde quede desterrado el pelotazo y los negocios de todo este conglomerado de constructoras y demás. Que el urbanismo y la construcción respondan al interés del pueblo, no de unos pocos que se forran comprando voluntades políticas para sus intereses.
P. Las encuestas hasta el momento no os auguran obtener representación, ¿cómo valoráis esto?
R. Las elecciones en todos los países capitalistas constituyen una farsa. Están diseñadas para que, ganen quienes ganen, manden los y las de siempre. Partidos distintos de nombre pero que cumplen un mismo papel: proteger los privilegios de la clase empresarial.
En este contexto, nuestro partido no se llama a engaño. Participa de este proceso electoral porque los y las comunistas no abandonamos ninguna confrontación en la que están en juego intereses del pueblo trabajador, a pesar de que las condiciones de la lucha sean absolutamente adversas: invisibilización mediática, desproporción absoluta de recursos…
Los y las comunistas dejaremos de participar en un proceso electoral cuando, o bien estemos ilegalizados, o bien la clase obrera tenga la suficiente fuerza y capacidad como para tomar el poder sin necesidad de acogerse a estos procesos absolutamente adulterados.
¿Más claro?. Jugaremos con “sus” normas hasta que podamos obligarles a “jugar” con las nuestras.
P.Parece que los resultados en Logroño van a ser muy apretados, ¿tu partido pactaría con PSOE, PP o PR?
R. Nos ofende esa pregunta. Mi organización no tiene nada que hablar ni que pactar con partidos que representan los intereses de la clase empresarial. Ellos tienen su agenda: perpetuar este régimen de dominación; los comunistas tenemos otra bien diferente. Organizarnos y luchar por destruirlo. Y eso vale tanto para el ámbito estatal, como para el autonómico o municipal. El PCPE quiere ser un instrumento y una voz de la clase obrera. Con el enemigo de clase y sus distintas expresiones políticas no hay nada de lo que hablar. Ojo, políticamente, que el saludo no se lo negamos a nadie.
P.¿Cuál es vuestra posición sobre los siguientes temas: soterramiento del ferrocarril, ecociudad y ordenanza cívica?
Hablar del soterramiento exige meditar acerca del problema que tenemos encima y que está pasando en La Rioja, desgraciadamente, bastante desapercibido, a pesar de que el PCPE ya lo ha denunciado, y que es el modelo de transporte al que se nos está abocando y los intereses empresariales que se defienden.
Existe una relación directa entre la “nueva panacea” que nos quieren vender, y que es el Tren de Alta Velocidad (TAV), y las centrales de ciclo combinado que están siendo instaladas por todo el valle del Ebro. Por decirlo de otra forma, que estas últimas se conviertan en las “gasolineras” del TAV, un medio de transporte de personas exclusivamente (ningún AVE hasta ahora ha llevado un solo kilogramo de mercancías), ineficaz como medio de conexión regional (¿la alta velocidad puede parar cada pocos kilómetros en todas las estaciones?), y con un gran impacto ambiental. Pero eso sí, resulta un absoluto chollo para los grandes oligopolios energéticos y eléctricos, que ya se están forrando.
Por lo tanto, en lo que respecta al tren: recuperemos el valor social de este medio de transporte y hagámoslo útil para el pueblo trabajador, no la excusa para hacer negocio de unos pocos. Y el ejemplo está en el esperpento que es el aeropuerto de Agoncillo.
En cuanto a la Ecociudad, pues se ocultan nuevamente intereses urbanísticos por seguir construyendo en nuevos espacios mientras miles y miles de viviendas en Logroño están vacías. Se le pone el nombre de “ecológico” o “verde” a algo que no es más que una nueva operación urbanística que va a llenar los bolsillos a unos pocos.
Y, por cierto, no hay que descartar que la Ecociudad y, en general, los intereses urbanísticos y especulativos tengan algo que ver con esa “confrontación” entre el Partido Popular y el chiringuito partidario que se ha montando en torno suyo el anterior alcalde. Confrontación en cuanto a los intereses que defienden, claro está, no en cuanto a la defensa de los intereses de la mayoría obrera y popular.
Por último, en cuanto a la llamada Ordenanza Cívica, resulta aborrecible hasta el nombre, pues la recogen como una Ordenanza de “fomento de la convivencia”. Para el conjunto de partidos presentes en al Ayuntamiento de Logroño, que la votaron por unanimidad, “convivencia” debe ser coserte a multas por poner mesas informativas o de recogida de firmas sin permiso, tener que pedir permiso para realizar estas actividades y esperar a que te lo concedan “graciosamente”, perseguir a personas sin techo (por cierto, personas que se encuentran en esa situación por las políticas económicas y sociales que sus partidos implementan…).
Esta Ordenanza tiene un objetivo: reprimir, sancionar, tratar de acobardar todas aquellas expresiones políticas o sociales que “molestan” y que deciden tomar la calle para hacerse oír.
Por lo demás, el papel absolutamente prepotente y chulesco de la concejala que la ha impulsado, a la hora de ningunear las quejas habidas, no son sino un pequeño ejemplo más de lo que lo que el pueblo puede esperar de estos “socialistas y obreros”.
P.El urbanismo es uno de los asuntos más espinosos en política municipal, ¿cómo analizáis este tema en vuestro partido?
R. El urbanismo constituye una de las competencias “estrellas” a nivel municipal, con mayores partidas presupuestarias y que por tanto, en manos de los partidos del sistema, se convierte en fuente de corruptelas, compraventa de favores y, siempre, anteponiendo los intereses de unos pocos a los de la mayoría.
Hay viviendas de sobra en Logroño, pero se sigue construyendo; se recalifican terrenos, haciendo algunos y algunas el negocio de su vida, mientras los precios hipotecan al pueblo trabajador de por vida.
En definitiva, el urbanismo es un buen ejemplo a escala de lo que significa el capitalismo: anteponer el lucro privado a un fin colectivo.
El PCPE analiza cualquier cuestión política desde el punto de vista de los intereses de la clase social a la que quiere defender: la clase obrera. Por lo tanto, en el tema urbanístico debe primar, como en todo, la planificación y la satisfacción de las necesidades colectivas reales, por encima del negocio privado.
P.¿Qué falta en los programas del resto de candidaturas, según vuestra opinión?
Esta respuesta va a ser corta. Lo que tiene el del PCPE: la defensa a ultranza, insobornable, y sin posibilidad de mediación, de los intereses y derechos del pueblo trabajador.
Y si no faltase en los programas, que reconozco sinceramente que no los he leído en profundidad, falta la actitud y la posición inequívoca por parte de esos partidos por hacer lo que te acabo de comentar. Y a las pruebas, en forma de declaraciones expresas, me remito. Unos porque abiertamente defienden los privilegios de la clase empresarial; otros porque dicen una cosa y luego hacen la contraria; otros porque dicen cosas que pueden “sonar” muy bien al oído pero están esperando a ver “por cuánto” se pueden vender y constituir la muletilla de alguno de esos grandes partidos…
El PCPE juega, en el terreno ideológico y político, “en otras ligas”.
P.¿Qué le dirías a un/a votante indeciso/a?
Si es un trabajador o trabajadora, autónomo proletarizado o en vías de hacerlo, pensionista, ama de casa, estudiante... que vote al PCPE porque es el partido que representa sus intereses. Pero ojo, que tenga claro que limitar su vida política al ejercicio del derecho al voto una vez cada cierto tiempo no resuelve nada. ¿Acaso lo resolvió alguna vez en la historia?. O se convierte en un sujeto activo que decide intervenir en las decisiones que le afectan, o se decide a dar un paso al frente y apostar por un modelo económico social, político y económico que deje atrás todo mecanismo de explotación e injusticia; o su voto servirá para muy poco, desgraciadamente. Aunque sea para el PCPE.
Si es un burgués, un especulador, un vividor del sudor ajeno, pues que aproveche para votar lo que quiera salvo al PCPE porque si nuestro partido y la clase obrera llegan a ejercer el poder, se le termina el chollo literalmente. Y entonces, o se decide a ganarse la vida honradamente, con su esfuerzo y su sudor, o sencillamente, no comerá.
P.¿Quieres añadir alguna cosa más que sea de interés para nuestros lectores?
Que quienes nos conocen saben que para el PCPE, la lucha contra el capitalismo y por la emancipación de la mayoría obrera y popular, continúa después del 22 de Mayo. Ese es el mejor aval con el que nos presentamos, nuestra voluntad de combatir al capital y a sus gestores políticos con todas nuestras fuerzas, todos los días del año.
¡HASTA LA VICTORIA SIEMPRE!
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